Cuánta nostalgia, cuántos recuerdos de infancia; y bueno… cuántas travesuras de adolescentes se gestaron en las humildes aulas y corredores del inolvidable Centro Escolar Alberto Menjívar Rodríguez.
Solo el que no estudio en el “grupo” como cariñosamente se le llamaba a nuestra humilde y sencilla escuela en la década de los 80’, podría mostrarse indiferente al escuchar hablar del principal centro educativo de nuestro municipio.
Estoy seguro que todo ex alumno de la Alberto Menjívar Rodríguez, guarda aunque sea el mínimo recuerdo de aquellos años en los que pasó por las sencillas aulas; y más de alguno añora esos dorados tiempos.
Los desfiles obligatorios en el mes cívico, las detestables vacunas que la mayoría trataba de evitar infructuosamente, y claro lo que todos esperábamos los famosos intramuros, las hembras se mandaban con el bate jugando al sotfbol y los varones armaban el mejor equipo de fútbol en cada grado para quedar campeones, en la conocida cancha polvosa del barrio La Loma.
Qué época, no se pero recordar todas esas anécdotas y esas vivencias genera una serie de sentimientos porque nos transportamos a través del tiempo y nos hace tener presente incluso, el primer día que asistimos a la escuela.
Ese era el primer día que deseábamos, pero que al mismo tiempo esperábamos que no llegara, todos nos veíamos como desconocidos, el niño o la niña sentada en el pupitre de mi lado no decía nada, todos como “pollos comprados”, de repente a la primera de cambio surgió más de un compañerito atrevido que nos dio la primera “tastasiada”, bueno eso nos hizo tomar valor y darnos nuestro lugar.
Jajajajaja……qué recuerdos, a casi todos nos pasó algo; y más en la Alberto Menjívar Rodríguez, allí siempre habían novedades; desde aquel que se robaba los lápices, hasta aquellos que se daban sus escapaditas en los recreos para propinarse su “amontonada” a escondidas atrás de aulas o en la finca cercana al pabellón número uno.
Bueno, el centro escolar tiene mucha historia desde su construcción en 1959 y la inauguración del primer pabellón en marzo del mismo año, ese terreno fue donado por María Julia López en un principio se llamaba Instituto de Colonización Rural, según los archivos consultados.
A 50 años de la inauguración la Alberto Menjívar Rodríguez ha experimentado grandes cambios, con 644 alumnos el centro escolar se ha convertido en uno de los más destacados en el departamento de Cabañas.
Los estudiantes diariamente reciben su alimentación, un menú variado que el estado otorga. En cuestión de enseñanza desde el primer grado se les imparte el idioma inglés y reciben clases de computación, los más destacados tienen la oportunidad de competir por becas, así lo expresó Guadalupe Hernández, subdirectora del centro, la maestra lleva 31 años impartiendo clases y ha visto pasar varias generaciones por las aulas de la escuela.
Galería fotográfica de los ex directores del Centro Escolar Alberto Menjívar Rodríguez
Auditorio construido para la realización de eventos y reuniones.
El último de los pabellones donde por años han estado las aulas del tercer ciclo.
El famoso cafetín donde los panes con frijoles y plátanos fritos; acompañado de un café, ha sido y es el menú favorito de los alumnos.
En los años 80', en este corredor se hacían los eventos del centro escolar.
Alumnos reciben clases en una de las aulas del segundo pabellón.
Dos alumnos caminan frente al segundo pabellón, en los años 70' y 80' aquí se hacían la formación diaria previo a entrar a las aulas.
Llega esporádicamente de noche a todo galope y a la velocidad de un rayo desaparece sin dejar rastro alguno, varias personas en Ciudad Victoria aseguran haberlo visto y en los últimos meses sostienen que ha regresado luego de 40 años.
